«MI YUGO ES LLEVADERO»

Seguro que estás cansado con frecuencia en tu día a día. ¿Será que estás intentando llevar algo muy pesado para ti? Claro. Pero esa carga no viene de Jesús. Empleas mucha carga de energía en sostener a tu ego que está engordando cada vez más y se está haciendo muy pesado.

Jesús te ofrece una salida: quítate esa carga. Te preguntarás: ¿qué significa eso?

Lo primero vivir con Jesús todas las situaciones de tu vida con una relación en comunión con él. Entonces se produce un gran traspaso de cargas: la tuya le pasa a él; y la suya, que es ligera, te la puedes quedar tú. Y después, dejar tu ego. Aprender la mansedumbre y humildad del ser.

¿Tienes ahora algún yugo que no te ayuda a la alegría y la paz? Quítalo de encima.

(E.A.)