- benedictinas
- 15/09/2024
- 17:00
María está con Jesús a los pies de la cruz no por casualidad. Desde la anunciación, se había comprometido a acompañar la vida de su hijo. Y su «sí» fue fiel hasta el final.
Está de pie, como siempre; no desalentada, ensimismada en su sufrimiento, sino firme, sosteniendo apoyando a su hijo con la esperanza de la victoria final.
Es curioso; hay otras dos Marías por muy diferentes razones. María, esposa de Cleofás, hermana de María, probablemente esté para consolar a su hermana. Y María Magdalena, por su gran amistad con Jesús.
También nosotros nos acercamos a la cruz de muy diferentes maneras: el dolor, las pérdidas, las renuncias, las enfermedades… Lo importante es PERMANECER.
Todos hemos sido encomendados a María. Esto nos da una gran alegría y confianza. Ella sostendrá nuestro «sí» hasta el final.
(Sor Ernestina)